manámaná

Esta receta es una adaptación de un libro de recetas vegetarianas que me regaló mi madre. Las albóndigas de vegetales son vergonzosamente fáciles de hacer, permiten congelarse y hacer múltiples variaciones y aliños (detallados en el punto "extras" de esta receta), están buenas solas, con salsas, como acompañamiento a carnes, pescados y huevos e incluso como postres (ver en "alternativas" usando batatas/boniatos) y son tremendamente sanas y nutritivas. ¡Cómelas bien calientes!

1 berenjena muy grande
400 gr de espinacas
4 zanahorias
queso emmental rayado, gruyere u otro tipo de tu gusto
puré de patatas en polvo

preparación

Describiré aquí cómo hacerlas al microondas, pero también se puede hervir la verdura como alternativa. Lava y trocea en trozos muy pequeños la verdura (especialmente las zanahorias, que les cuesta más cocerse) y ponla en platos hondos con agua a cocer en el microondas. Ve añadiendo más agua y tiempo a medida que lo necesiten hasta que la verdura esté bien cocida, porque se podrá aplastar con un tenedor. Retira el agua sobrante y aplasta la verdura con un tenedor. Añade el puré de patatas en polvo y mézclalo todo bien (a más puré pongas las albóndigas tomarán un color más claro). Si queda demasiado seco añade un poco de agua. Añade el queso y mezcla, que no importe que el queso tienda a derretirse por el calor de la verdura. Tienes que formar una pasta bastante sólida. Con un par de cucharas y las manos haz bolas y enharínalas. Fríelas justo antes de servir con aceite de girasol a ser posible.

alternativas

Sustituye el queso emmental por el que prefieras, por pan rallado o no uses ninguno. Puedes usar otras verduras, como calabacín, puerro, boniato, batata/boniato (¡excelentes como postre acompañadas con miel de caña/melaza!), etc. También puedes usar patatas hervidas en vez de puré de patatas, ¡evidentemente sabrán aún mejor!

extras

Puedes poner en el corazón de cada albóndiga algún ingrediente que le pegue, por ejemplo un trozo de queso azul o roquefort con las espinacas, cebolla hervida mezclada con la berenjena o, en el caso de la zanahoria o la batata/boniato, media cucharadita de miel de caña/melaza enfriada hasta volverse sólida.