Aprendí a hacer panecillos dulces hace muchos años gracias a la madre de mi Tía Ana. Esta receta aprovecha los restos de pan duro, es tremendamente sencilla y permite miles de variantes (apunto sólo algunas aquí, mi favorita podéis verla en la foto). Los panecillos dulces son estupendos para merendar, desayunar o llevar de viaje y una alternativa más sana y deliciosa a la bollería industrial.
1/2 barra aprox. de pan duro, de distintas variedades si lo hay
Leche, mejor desnatada
1 Huevo
Azúcar moreno
Ralladura de cáscara de limón
preparación
Poner a ablandar el pan en un tupperware grande con leche y dejar en el frigorífico durante medio día o un día entero. Sacar de vez en cuando y agujerearlo con un tenedor para que se vaya empapando de la leche. Añadir azúcar moreno al gusto, cuando la pruebes ten en cuenta que no debe estar muy bajo de azúcar ya que se perderá un poco de dulzor al cocinarse. Cuando el pan esté bien desmenuzado y empapado escurrir presionando. Batir un huevo y añadir removiendo. Si la masa tolera más añadir más huevo batido, pero ten en cuenta que no debe quedar líquida porque luego harás albóndigas con ellas. Añadir el limón rallado, cantidad al gusto. Volver a escurrir la masa. Con dos cucharillas de postre o las manos hacer albóndigas pequeñas e ir echando en una sartén pequeña con aceite caliente. Debe haber aceite para cubrir las albóndigas sólo hasta la mitad. Vigilarlas porque se doran muy rápido y darles la vuelta cuando sea conveniente. Es importante que el aceite se mantenga poco caliente para que también se hagan en el interior (mientras más grandes los panecillos más fácil es que se queden poco hechos por dentro). Recuerda que también puedes hacerlos al horno sobre papel de aluminio o de horno con unas gotas de aceite. A medida que los sacas de la sartén ponlos en un plato con papel de cocina para quitarles el aceite o sobre una rejilla o escurridor metálico. Se pueden tomar calientes en el momento o dejarlos enfriar, guardándolos en un tupperware con papel de cocina en el frigorífico para tomarlos los días siguientes.
extras
A la masa se le puede añadir canela, sésamo, especias, anís, nuez moscada o una cucharadita de licor. Otra forma de aromatizar es hervir la leche que se va a usar para el pan con las especias, la canela o incluso un té aromático. Si escurres mucho la masa puedes poner en el centro de cada panecillo un trocito muy pequeño de chocolate para postres antes de freírlos.
alternativas
En vez de ralladura de limón se puede usar de naranja o manzana. También y se puede hacer sólo con la clara del huevo o sin huevo, pero en este último caso habrá que escurrir más la masa y freílos con aceite más caliente porque tenderán deshacerse un poco.
Una alternativa a tener que comerlos cuando has tenido pan de sobra es congelarlos envueltos en papel film transparente para poder prepararlos en el momento que los quieras comer.
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